Presentación en Porrúa.
Hay situaciones que salen de lo planeado, como el día de ayer. La presentación de "Hoy aprendí la palabra cáncer" se llevaría a cabo en la librería Porrúa de Chapultepec a las 17 hrs, todo listo para comenzar: sillas, personas ocupando sus lugares,etc. Minutos antes, el cielo tronaba y una tormenta descomunal comenzó a darnos la bienvenida. Lo que antes era un lugar tranquilo, silencioso, se volvió un ir y venir del personal de la librería que corría salvaguardando los libros de los estantes que ya estaban siendo alcanzados por las cascadas internas que caían por los pasillos y el techo. A través de los ventanales, las personas que remaban en sus lanchas por el lago de Chapultepec, apenas se lograban orillar para cubrirse del granizo que golpeaba las aguas...Reforma era un río, apenas se veía la calle de enfrente. Lo que se vislumbraba como un evento fallido, por causas de fuerza mayor, terminó siendo una de las presentaciones más cercanas, sensibles y amenas que recuerdo. Con este antecedente, incluyendo la imposibilidad del cuentacuentos por llegar, tuve la presencia de un público encantador que llegó a pesar de todo, el equipo de la librería ofreció su apoyo invaluable para respetar el evento y, por si fuera poco, la presencia y testimonio de Haydee Noya (luchadora incansable, que tiene el tema de la leucemia presente en la vida de su niña) y su labor en Tlaxcala con tantas familias que enfrentan esta enfermedad, enriqueció la charla. Una presentación que se convirtió en una conversación entre amigos, con hermosas coincidencias, profundas historias de vida que nos recuerdan lo cercanos que estamos...gracias a quienes me acompañaron, fue un evento genial que me reiteró que: después de la tormenta, siempre sale el sol...(y la prueba en las fotos).